SE ENCONTRO EL DINERO
Vie 26 Feb 2010, 5:47 pm
Saludos amigos tratando de aprender a pegar temas con imagenes encontre esta historia y
tratando de ver si la puedo pegar para compartirla con todos.
Se Encontró El Dinero
(Versión de la Sra. Ma. Concepción Hernández Arvizu)
Debido
a que nuestra ciudad es muy antigua y por mucho tiempo no existieron
bancos, era común que la gente guardara su dinero, monedas de oro o
plata, enterrándolo en lugares secretos. Algunas personas al morir se
llevaban a la tumba su secreto, pues nunca le comentaron a nadie la
existencia de sus tesoros ocultos. En el presente es común escuchar a
la gente decir que alguien de repente se hizo rico porque "se encontró
el dinero".
Una de estas fantásticas historias es la siguiente:
En la década de 1950, una joven al dirigirse a la bendición nocturna a
la Parroquia de San Luis Rey en compañía de su hermana se le quebró un
tacón de su zapato. Mientras su hermana se regresó a traerle otros
zapatos, ella se sentó en la banqueta, a pocos metros de su casa en la
calle Morelos, entre Josefa Ortiz y Bravo. Al estar esperando, le
pareció escuchar el ruido de unas cadenas arrastrándose. Ella por el
miedo ignoró el extraño ruido y ya con nuevos zapatos se dirigió a la
iglesia.
Por la noche al estar dormida, sintió que alguien la
descobijaba, por lo que se tapó. Otra vez la descobijaron, por lo que
se sentó en la cama y vio un bulto blanco. Pensando que era uno de sus
hermanos, le pidió que ya dejara de andar de travieso y la dejara
descansar. Nuevamente la destaparon y sentándose de nueva cuenta en la
cama, volvió a contemplar la figura blanca. Gritó: ¡ya déjame dormir!. Se volvió a acostar y se durmió.
Al
día siguiente, le dio la queja a sus padres de que uno de sus hermanos
no la había dejado dormir. Su papá fue a reclamarle al hijo por su
acción, pero para su sorpresa él negó todo.
Pasaron los días y
la joven volvió a sufrir la misma experiencia. Pero en esta ocasión se
dio cuenta que el bulto blanco, no era su hermano sino un fantasma. A
partir de entonces este espíritu se le apareció constantemente.
Al
hacerlo, le dijo en diversas ocasiones que él tenía un presente que
darle, un tesoro enterrado en su misma casa. Este constaba de un caso
lleno de monedas, mitad de oro y mitad de plata. El fantasma le
prometió decirle donde estaba, a cambio de que a media noche lo fuera a
sacar con él. Además, de que al desenterrarlo, tenía que entregar un
cofre de metal lleno de medallas al Templo de la Virgencita; así como
mandarle decir unas misas y rosarios. Finalmente, que le diera las
gracias personalmente de mano. Ella muda del miedo no podía contestarle.
La
joven le contó lo sucedido a sus padres. Al principio, no le creyeron,
pero en cierta ocasión al estar lavando junto con su mamá en el patio
trasero de la casa, contempló al fantasma y empezó a tartamudear.
Temblando le señaló a su mamá lo que veía, pero la mamá no distinguía
nada. La muchacha más tarde le comentó que observó al bulto blanco
bajando los restos de una cerca tirada que dividia la casa con la que se encontraba a espaldas.
Siguiendo
el consejo de su padre, la siguiente vez que vio al ánima, se colocó
una medalla de San Ignacio de Loyola en la boca para poder constarle.
Ella le comentó que ella no quería sacar el dinero pero que su papá si
estaba dispuesto. El espíritu le respondió que tenía que ser
exclusivamente ella.
A los pocos días la joven se casó y se fue a vivir al rancho. Pensó que al suceder esto se libraría del fantasma... pero hasta allá la siguió! La petición siguió siendo la misma.
Su
esposo al estar enterado de ello en la próxima aparición le dijo de
maldiciones. Por lo que el bulto blanco ya nunca jamás la molestó. ¿El
tesoro? Del tesoro se dice que un nieto dueño de la casa trasera lo
encontró. Ahora es un acaudalado comerciante y la gente dice que es
porque... se encontró el dinero.
tratando de ver si la puedo pegar para compartirla con todos.
Se Encontró El Dinero
(Versión de la Sra. Ma. Concepción Hernández Arvizu)
Debido
a que nuestra ciudad es muy antigua y por mucho tiempo no existieron
bancos, era común que la gente guardara su dinero, monedas de oro o
plata, enterrándolo en lugares secretos. Algunas personas al morir se
llevaban a la tumba su secreto, pues nunca le comentaron a nadie la
existencia de sus tesoros ocultos. En el presente es común escuchar a
la gente decir que alguien de repente se hizo rico porque "se encontró
el dinero".
Una de estas fantásticas historias es la siguiente:
En la década de 1950, una joven al dirigirse a la bendición nocturna a
la Parroquia de San Luis Rey en compañía de su hermana se le quebró un
tacón de su zapato. Mientras su hermana se regresó a traerle otros
zapatos, ella se sentó en la banqueta, a pocos metros de su casa en la
calle Morelos, entre Josefa Ortiz y Bravo. Al estar esperando, le
pareció escuchar el ruido de unas cadenas arrastrándose. Ella por el
miedo ignoró el extraño ruido y ya con nuevos zapatos se dirigió a la
iglesia.
Por la noche al estar dormida, sintió que alguien la
descobijaba, por lo que se tapó. Otra vez la descobijaron, por lo que
se sentó en la cama y vio un bulto blanco. Pensando que era uno de sus
hermanos, le pidió que ya dejara de andar de travieso y la dejara
descansar. Nuevamente la destaparon y sentándose de nueva cuenta en la
cama, volvió a contemplar la figura blanca. Gritó: ¡ya déjame dormir!. Se volvió a acostar y se durmió.
Al
día siguiente, le dio la queja a sus padres de que uno de sus hermanos
no la había dejado dormir. Su papá fue a reclamarle al hijo por su
acción, pero para su sorpresa él negó todo.
Pasaron los días y
la joven volvió a sufrir la misma experiencia. Pero en esta ocasión se
dio cuenta que el bulto blanco, no era su hermano sino un fantasma. A
partir de entonces este espíritu se le apareció constantemente.
Al
hacerlo, le dijo en diversas ocasiones que él tenía un presente que
darle, un tesoro enterrado en su misma casa. Este constaba de un caso
lleno de monedas, mitad de oro y mitad de plata. El fantasma le
prometió decirle donde estaba, a cambio de que a media noche lo fuera a
sacar con él. Además, de que al desenterrarlo, tenía que entregar un
cofre de metal lleno de medallas al Templo de la Virgencita; así como
mandarle decir unas misas y rosarios. Finalmente, que le diera las
gracias personalmente de mano. Ella muda del miedo no podía contestarle.
La
joven le contó lo sucedido a sus padres. Al principio, no le creyeron,
pero en cierta ocasión al estar lavando junto con su mamá en el patio
trasero de la casa, contempló al fantasma y empezó a tartamudear.
Temblando le señaló a su mamá lo que veía, pero la mamá no distinguía
nada. La muchacha más tarde le comentó que observó al bulto blanco
bajando los restos de una cerca tirada que dividia la casa con la que se encontraba a espaldas.
Siguiendo
el consejo de su padre, la siguiente vez que vio al ánima, se colocó
una medalla de San Ignacio de Loyola en la boca para poder constarle.
Ella le comentó que ella no quería sacar el dinero pero que su papá si
estaba dispuesto. El espíritu le respondió que tenía que ser
exclusivamente ella.
A los pocos días la joven se casó y se fue a vivir al rancho. Pensó que al suceder esto se libraría del fantasma... pero hasta allá la siguió! La petición siguió siendo la misma.
Su
esposo al estar enterado de ello en la próxima aparición le dijo de
maldiciones. Por lo que el bulto blanco ya nunca jamás la molestó. ¿El
tesoro? Del tesoro se dice que un nieto dueño de la casa trasera lo
encontró. Ahora es un acaudalado comerciante y la gente dice que es
porque... se encontró el dinero.
- PachitoGran Experto del Foro
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Frase Célebre : Los locos hacemos camino, que un dia aquellos que se hacen llamar cuerdos recorreran.
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Re: SE ENCONTRO EL DINERO
Dom 14 Mar 2010, 9:50 pm
excelente historia chef ya puedes seguir pegando buenas historias como esta, aca estaremos atentos para leerlas.
saludos.
saludos.
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