Tierra de cristeros

Tierra de cristeros; me haye este relato interesante espero les agrade, tiene algunas pistas que pueden ser buenas...


Después de dos largos años de revolución y que en esos tiempos había muchas personas bondadosas que daban mucho dinero a todos los jefes y principalmente a Victoriano, tenían mucho dinero junto los jefes y para no andarlo cargando lo sepultaban en la tierra o en alguna parte.
Mientras tenían oportunidad de hacer sus compras como armamento, parque, etc. Y a veces no ocupaban ese dinero porque ya se los mandaban regalados y a veces enterraban hasta armas que tenían de sobra y a veces tenía dinero prestado con algunas personas.
Se cuentan que todavía existen muchos tesoros enterrados, según relaciones de personas que más o menos se dieron cuenta, más no saben el sitio exacto donde pueden estar pero un más menos se dice que en el Cerro del “Águila” jurisdicción de Arandas en la mentada Fragua que se encuentra al lado sur del cerro.
Puede haber tres o cuatro entierros de bastante plata en la Angostura, ese según versiones fue sacado.
En el cerro del Águila fue encontrado otro dinero por unos muchachos que se encontraron en un escarbadero una moneda de a peso; siguieron escarbando y encontraron el demás dinero, pero los demás valores no han sido encontrados. Se cuenta de otra relación en el “Salto Prieto lugar donde con frecuencia asistía el (14). Ahí según se cuenta puede haber 2 o 3 entierros de plata y oro y así en muchos lugares puede haber donde él asistía como por ejemplo en el cerro “Pelón” en el cerro de la “Peña” y en el del “Caracol”. En el Salto Prieto puede estar en una cueva donde el asistía con 10 soldados (o se la que se ve en la estampa) que podían estar cómodamente.
Es una cavidad entre las rocas que sólo tiene una entrada por una pared de la barranca.
Está como a la mitad del salto con una puerta angosta, que nunca fue encontrada por los federales.
Además según versiones se encuentran más tesoros que no se pueden describir exactamente, porque andaban por muchas partes.
Hay personas de las que tenían ese dinero, que quedaron ricas, y muy bien, les tocó según por lo que se ve ese dinero es bien habido. ¿Quién se los reclama? El dueño ya no existe.
He aquí una hazaña horrorosa de una mujer exploradora de Gobierno.
Fue en Agosto de 1928 cuando se verificó este hecho horroroso iba cruzando esta dicha mujer en su exploración de Arandas con rumbo a San Julián.
Fue detenida por los cristeros en un callejón de un rancho llamado “La Galera” propiedad de los Sres. González. La agarraron por sospechosa porque ya la habían visto varias veces pasar por esos rumbos y nomás pasaba y en seguida venia el Gobierno directamente a donde los cristeros estaban.
Victoriano dio la orden de que fuera detenida para investigarla y para registrarla a ver que traía en sus ropas harapientas. Donde la empiezan a esculcarla ella dice; de balde que son “Cristeros” buenos y honrados y se atreven a esculcar a una mujer en estas forma en vez de respetar mis años y mis canas.
Pero como Victoriano sospechaba algo en ella les da la orden a sus soldados y les dice;
¡Escúlquenle hasta la boca!_ empezando el esculque y aquella mujer endemoniada los tapaba a blasfemas y a manotazos en su propia defensa._ Les fueron encontrados un montón de papeles y cartas entre sus ropas dándose cuenta de que era una efectiva exploradora y como ya se aproximaba la puesta del sol, Victoriano les dice a su gente. ¡Tráigansela y vámonos a dormir al cerro del “Águila” para investigarla, a ver que más le sacamos!...
En esta parte donde investigaron a la mujer fue en la Fragua o banco de herrar caballos.
Ahí le dijeron que se encomendara a Dios por que la iban a fusilar, y antes de eso que confesara todo. Efectivamente soy exploradora y le sirvo al gobierno en esa forma y no me importa lo que me sobrevenga ni les imploro su perdón. Ellos siempre le desean a cada paso, que se encomendara a la Virgen de Guadalupe y ella les contestaba. ¿Cómo me voy a encomendar a una mujer igual que yo?_
No cesaba de blasfemar a Dios a los santos y a ellos. En ver que no le aceptaba nada de ninguna proporción, y como ya era de noche y no se oía nomas del susurro de las hojas movidas por un fuerte viento, el estridor de grillos y el aullar de coyotes en aquel cerro misterioso. Victoriano da la orden de que se lleven a dormir a una casa cercana como a 50 metros de la fragua a la mujer para que pasara la noche. La manda con 6 seis soldados para que fuera resguardada por la noche. En esa casa, los familiares la atendieron muy bien dándole de cenar.
Le ofrecieron un jarro lleno de leche, lo cual la acepto gustosamente. Las familias le dijeron que si no le hacía daño con las bilis.
Ella contesto: ¡Esos gorrudos no me asustan! Si acaso me matan, yo no le tengo miedo a la muerte. De esa manera cenó hasta quedar satisfecha.
Después de cenar la llevaron a un cuarto donde iba a dormir empezando a ver imágenes que representan a los del cielo. ¿Cuál cielo? Pregunta ella; las familias de la casa le dicen: pídale a los santos para ver si Dios por medio de ellos le conceda el milagro.
Yo no tengo esa creencia; ¡y por favor quiero dormirme, contesto; le arreglaron su cama y las familias se fueron horrorizadas y pensativas por aquel caso no pudiendo probar sueño en toda la noche lo cual, ella durmió perfectamente.
Otro día por la mañana le hacen una pregunta ¿Esta dispuesta y arrepentida para que haga su confesión con un sacerdote de la tropa que se encuentra en este cerro? ¡Ya me enfadaron con eso ¿si me van a matar que aguardan? _ Al cabo yo sé que me pagarán con la misma el gobierno anda muy cercas de ustedes.
Van con él a preguntarle los soldados que ¿qué se debería hacer con aquella mujer? Él contesta... ¡yo no quiero ser felónico con nadie y menos con una mujer, los dejo libres, hagan con ella lo que quieran, si quieren denle la libertad o sino... fusílenla. ¡Que sea fusilada! Se oyó la voz de la tropa. Así fue, se la llevan de la casita y ya donde estaban retirados ahí la fusilaron.
Según se cuenta le dieron algunos balazos y no se moría; pero no demostraba ningún arrepentimiento los cuales ya se negaban a disparar más tiros, hasta que un soldado llamado Miguel Pérez por no verla tanto penar le dispara el tiro de gracia en la frente quedando muerta en el acto.
Según se cuenta en las tradiciones de los cristeros esa fantástica mujer era hombre disfrazado en mujer.
Los Rebeldes salieron ese día a otro cerro cercano y las familias de la casa se fueron a donde habían oído los disparos encontrando a la mujer muerta, por lo cual, ellos se ponen a hacer una fosas para dale sepultura. ¡Cual no sería el horror que recibieron esas pobres gentes al ver ese cadáver tan feo aspecto, que representaba ver muerto con una desesperación furiosa, teniendo el pelo de la cabezas grifo o parado, los ojos abiertos la boca abierta y algunas otras contracciones desfiguradas.
Demostraba un gesto de cólera: Después de que le dieron sepultura los familiares de la casa, hacen su mudanza a otro rancho lejos de ahí, porque seguido se les representaba aquel espectáculo trágico y horroroso. Así es como finalizó la tragedia de dicha exploradora muerta por el soldado Cristero Miguel Pérez